(comienza una nueva semana para concienciar sobre este terrible problema que afecta ya a 7 millones de españoles)
Parece que las temperaturas remontan, pero no nos olvidamos de los días de frío que hemos pasado y que han llenado de nubes y termómetros en rojo las previsiones meteorológicas. ¿Se imaginan quien ha pasado estos días sin poder poner la calefacción?, ¿quién vive en espacios insalubres con corrientes, grietas, humedades…? Muchas veces nos parece algo alejado de la realidad, pero está ahí. Los datos de la Asociación de Ciencias Ambientales no dejan lugar a dudas y aprovechando que hoy 17 de febrero comienza una Semana Europea de laPobreza Energética, en Zona Confort aprovechamos para recordarlos.
Cartel de la Semana Europea de la Pobreza Energética (fuente: ACA Ambientales)
ACA nos recuerda en su nuevo trabajo que “son muchos los representantes
de los partidos políticos y las organizaciones sociales que han marcado el foco de la pobreza energética en el bono social, uno de los pocos instrumentos existentes para proteger el consumidor vulnerable.”
Tras un Real Decreto aprobado por el Consejo de Ministros a finales del pasado año, a partir de ahora la financiación del bono social provendrá de todas las comercializadoras de electricidad.
ACA nos recuerda que este decreto realiza la introducción de algunas medidas algunas muy positivas para los que sufren de pobreza energética como una nueva categoría de suministro de energía >eléctrica de carácter de esenciales para consumidores vulnerables severos, la ampliación de dos a cuatro meses el periodo de aviso en el caso de los consumidores vulnerables o la obligación del contacto con los servicios sociales para comprobar si un usuario entra en la categoría de «extremadamente vulnerables» antes de realizar un corte de suministro.
Europa también está impulsando medidas para aplicar estrategias que den respuesta a este problema: Se aumenta la exigencia de eficiencia energética del 27 al 30% para los estados miembros y se va a revisar la Directiva de rehabilitación de edificios para acelerar el ritmo de las actuaciones y dinamizar el mercado.
Y es que ya no queda ninguna duda y la Unión Europea lo sabe. La única solución para acabar con la pobreza económica y prevenirla para un futuro es apostar por la rehabilitación con criterios de eficiencia energética, por un buen aislamiento que reduzca las necesidades de energía, por instalaciones eficientes, etc.
En nuestro país hay más de 25 viviendas que necesitan una rehabilitación. Foto @CPACcomunicación
El fomento de la rehabilitación a de completarse con una transición justa hacia un modelo energético limpio, la creación de un Observatorio que permita analizar la situación de la pobreza energética en Europa y el intercambio de buenas prácticas entre los Estados Miembros y la confección de planes de energía y clima de los Estados Miembros. Solo de esta forma no tendremos que repetir dentro de otro año estas cifras tan angustiosas.
