El ruido excesivo o demasiado alto y, sobre todo, si lo sufrimos de forma constante, puede ocasionar muchos problemas de salud, aparte obviamente de generar molestia y reducir el confort en cualquier vivienda o espacio de trabajo.
Repasamos a continuación algunos de los efectos negativos más importantes que provoca el ruido en nuestra salud y qué soluciones podemos aprovechar.
- Trastornos auditivos: La exposición al ruido constante puede provocar trastornos auditivos de muy diversa tipología, siendo una de las más conocidas la de acúfenos o zumbidos de forma persistente.
- Pérdida de audición: A partir de los 70 dB y en exposiciones de larga duración, es posible sufrir pérdida de audición progresiva.
- Estrés: El ruido constante genera una molestia que afecta al sistema fisiológico. Por ejemplo, impide que sustancias como la adrenalina vuelvan a su nivel óptimo hasta después de que ya no se escuche el ruido, aumentando el estrés y la ansiedad en la persona.
- Problemas cardiovasculares: Se ha identificado una relación entre una exposición a un ruido alto y problemas cardiovasculares como el aumento de la presión arterial.
- Problemas de sueño: Si el ruido se genera durante la noche en horas de sueño, puede impedir a la persona disfrutar de un descanso apropiado, con más consecuencias derivadas de ello.
- Problemas de comunicación: Obviamente un ruido constante y demasiado alto genera problemas a la hora de comunicarse con otras personas.
- Bajo rendimiento en el trabajo: El ruido reduce la concentración y aumenta el malestar también en el puesto de trabajo.
- Daños en el sistema nervioso: En algunas industrias, la exposición al ruido sin la protección adecuada, puede causar daños sobre el sistema nervioso de quienes están en ese espacio.
- Depresión: Muchas de las causas anteriores tienen como consecuencia un efecto emocional en quienes las sufren, a veces incluso llegando a provocar depresión.
¿Cómo aislarnos del ruido? Soluciones URSA
Cuando estamos en un espacio en el que pasamos mucho tiempo, como nuestra casa o el lugar de trabajo, donde sufrimos ese ruido, lo mejor es optar por soluciones de aislamiento acústico.
En URSA recomendamos para ello aprovechar las propiedades de la lana mineral de vidrio URSA TERRA. Se trata de un producto de origen natural, mineral e inorgánico, que se compone de un entrelazado de filamentos de vidrio, aglutinados con una resina ignífuga.
Este material cuenta con las prestaciones acústicas óptimas, para ofrecer un buen aislamiento acústico al ruido aéreo, al ruido de impacto y respecto a la reverberación acústica en locales.
Con el acondicionamiento acústico apropiado, podemos disfrutar del confort que buscamos en cualquier espacio, sin riesgo a sufrir ninguno de los problemas de salud detallados anteriormente.
La lana mineral de vidrio URSA TERRA nos permite alcanzar este objetivo, con la ventaja adicional de tener múltiples aplicaciones. Podemos aprovecharla en tabiques, trasdosados, falsos techos, suelos flotantes, cerramientos interiores, paredes dobles e incluso en fachadas ventiladas.
Además, también tiene propiedades en su composición que nos ayudan a conseguir un aislamiento térmico, la combinación ideal para que el espacio o estancia donde se instale pueda ofrecer el confort que estás buscando.